La domótica ha pasado en pocos años de ser casi desconocida, e inalcanzable para la gente, a que sea parte del día a día de mucha gente. De forma general, la domótica permite la gestión y automatización de los diferentes sistemas y equipos de la vivienda, haciendo nuestra vida más cómoda.
La domótica ayuda a las personas con discapacidad motriz o sensorial a superar barreras gracias a la automatización de diferentes elementos, permitiéndoles manipularlos mediante una interfaz que se adapta a la diversidad funcional de cada persona.
Domótica al servicio de la accesibilidad
Como hemos comentado, la clave de los sistemas domóticos adaptados es la interfaz y la adaptación de cada elemento del sistema a la diversidad funcional del usuario.
Por suerte, hay muchas empresas especializadas que permiten instalar sistemas domóticos adaptados a buen precio, puesto que los sistemas inteligentes pueden llegar a suponer un alto coste.
Para buscar soluciones adecuadas es necesario conocer a cada persona, sus necesidades, problemas, barreras,… y adaptar el sistema a todo ello.
La comodidad y automatización que permiten los sistemas inteligentes pueden ser usados por personas con o sin discapacidad, de manera indistinta. Es decir, una persona con baja audición puede controlar los electrodomésticos desde una aplicación, de la misma manera que una persona que no tenga problemas auditivos. Sin embargo, hay aspectos mucho más específicos para personas con diversidad funcional.
Iluminación inteligente
Imagina que te llaman al timbre o al fijo de casa. Te levantarás y abrirás. Sin embargo, una persona con problemas de audición no puede hacer esto.
Gracias a los sistemas de iluminación inteligente podemos crear perfiles de iluminación gracias a los cuales se enciendan luces de diferentes colores si llaman al timbre o al teléfono, entre otras cosas.
Control de aparatos especiales
Como hemos dicho, la domótica debe estar adaptada a la necesidad de cada uno. En este sentido, personas con movilidad reducida que requieran de aparatos especiales podrán controlarlo de manera remota, siendo más independientes.
Seguridad y alarmas
Una persona invidente, o con baja visión, tiene dificultad para identificar si hay alguien merodeando cerca de su vivienda. Las alarmas y sistemas de seguridad adaptados llevarán a cabo avisos especiales para advertir de posibles peligros al usuario.
Teleasistencia
La teleasistencia es un servicio destinado a personas con discapacidad. Gracias a la teleasistencia, si se produce cualquier problema o emergencia, con apretar un simple botón, se contactará con los servicios de emergencia.
Pantallas inteligentes
La gente con problemas cognitivos puede aprender a utilizar todos los aparatos de una vivienda y a controlarlos de manera domótica gracias a pantallas inteligentes especiales con pictogramas.
Claves de la domótica accesible
- Tecnología en el hogar
Como hemos visto, existen diferentes tecnologías adaptadas a las personas con discapacidad, como las grúas, la iluminación inteligente, la teleasistencia…
- Soluciones necesarias
No hay que instalar sistemas “a lo loco”, sino aquellos que solucionen de manera específica los problemas (y preferencias) de cada usuario.
Otro aspecto importante es potenciar la capacidad de decisión de las personas, tratando de evitar sistemas que toman constantemente decisiones en nombre del usuario.
- Simplicidad
Para gozar de las ventajas de la tecnología no es necesario instalar sistemas complejos y completamente integrados. Es más, para las personas con problemas cognitivos, cuanto más sencillo sea algo, mejor.
- Asequibilidad
Para que las tecnologías de control doméstico puedan llegar al máximo número de personas es imprescindible que el precio de las soluciones sea asequible.
- Autonomía
Una de las ventajas de la domótica adaptada es que dota de mucha más autonomía a las personas, algo que les falta en muchas ocasiones.