Artículo sobre cómo hacer que tu hogar sea accesible

Cómo hacer que tu hogar sea accesible

Mejorar la accesibilidad en el hogar es un tema cada vez más demandado y es objeto de estudios y soluciones dedicadas por profesionales, arquitectos e interioristas, fabricantes de sistemas, muebles, accesorios y soluciones para la vida hogareña.

Hacer accesible la casa significa tener aseos accesibles, cocina adaptada, adecuando las características, y necesidades espaciales de quienes la habitan, con el objetivo de mejorar la calidad de vida. Un hogar accesible es la respuesta al derecho a la autonomía doméstica de las personas con diversos tipos de discapacidades o limitaciones motoras incluso de duración temporal por accidentes, convalecencias, terapias y situaciones transitorias. La casa inteligente satisface las necesidades de la cambiante vida familiar: vejez, embarazo y niños pequeños. Adaptar tu vivienda para hacerla más accesible también es una inversión, tanto para prevenir tus necesidades futuras como para incrementar el valor de la propiedad.

Superando barreras verticales

A menudo, en edificios más antiguos, el ascensor no estaba previsto en la fase de diseño y, en los casos en que está presente, un tramo de escaleras separa el acceso de entrada del edificio, del nivel de acceso hacia el ascensor. Incluso dentro del apartamento hay barreras verticales que rompen el flujo de la movilidad individual: áticos, sótanos, escaleras externas para acceder a los pisos superiores, entrepisos con tramos cortos de escalones.

En estas situaciones, la instalación de un mini ascensor es la solución permanente al problema.

Accesibilidad de los espacios interiores de la casa

A continuación, desde Aseguramos-Online nos muestran los mejores consejos para mejorar la accesibilidad del hogar, útiles para personas mayores, cocinas adaptadas para sillas de ruedas, personas con capacidad de movimiento reducida permanente o temporal y discapacitados.

En caso de situaciones personales particulares o capacidades sensoriales limitadas, es recomendable contar con el asesoramiento de un experto para identificar las soluciones específicas que mejor se adapten a su condición.

  • Cocinas adaptadas:

La cocina accesible debe ser funcional y segura. A partir de la motricidad de la persona, es necesario diseñar los espacios de circulación y maniobra, eliminando cuellos de botella y bordes, y colocando las encimeras y electrodomésticos a la altura adecuada.

A nivel organizativo, los electrodomésticos y estantes para utensilios deben disponerse de manera inteligente para minimizar los viajes y hacer que todo sea accesible. Las cocinas de inducción son preferibles porque concentran el calor en una superficie limitada, no funcionan con llama y evitan el riesgo de fugas de gas. Es posible completarlos con un panel luminoso que señala si la estufa está encendida y también ayuda a las personas con visión y reflejos débiles a protegerse del riesgo de quemaduras.

  • Aseo accesible:

El tamaño a menudo pequeño de este entorno y la limitada posibilidad de maniobra para quienes viajan con muletas, en silla de ruedas o tienen dificultades de movilidad hacen necesario una gestión inteligente del espacio. Las medidas que debe tener un aseo adaptado deben permitir fácilmente movimientos y maniobras, empleando un círculo de 1,5 m de diámetro, sin que ninguna barrera arquitectónica toque dicho círculo.

Para los aseos accesibles es importante dejar suficiente espacio para maniobrar en el frente y al costado de los accesorios del baño. Grifería con mandos de palanca o fotocélula, desagües táctiles colocados en posición accesible y suelos de ducha antideslizantes son soluciones sencillas y eficaces. Para hacer un aseo practicable, existen en el mercado inodoros, sanitarios, duchas y bañeras aptas para diversas necesidades, con diferentes tipos de soportes para levantar y sostener a la persona. Para quienes viajan en silla de ruedas, existen reglas compartidas para colocar los accesorios de los aseos adaptados, a las alturas adecuadas.

  • Habitación adaptada:

La habitación adaptada minusválidos utiliza unas ayudas que aumentan la funcionalidad y el confort: una cama regulable en altura, para facilitar la asistencia de la persona, y con la red eléctrica operada por mando a distancia, para facilitar los cambios posturales y el levantamiento de la persona sin esfuerzo.

En cuanto a la organización del espacio, el vestidor es la solución que permite llegar fácilmente a todos los estantes y organizar el armario a una altura adecuada para la persona. La cabina se puede completar con estantes correderos eléctricos, cajones transparentes para mostrar el contenido y puertas correderas, que no requieren un espacio frontal para abrirse.