Antes de hablar de estos cuatro concepto, dejemos clara la importancia de la cultura (conjunto de conocimientos e ideas adquiridas). Un concepto que va de generación en generación en la transmisión de conocimientos, normas, valores, creencias y hábitos. Por ello, se puede concluir que la cultura es aprendida, compartida socialmente y es adaptable a cada época pudiendo renovarse continuamente. 

A lo largo del tiempo, el concepto de discapacidad fue modificándose al igual que los contextos sociales en cada momento histórico. Es por esto que antes se entendía a la discapacidad de una forma y hoy podemos definirla de otra, ya que la historia, la cultura y los avances en la sociedad así lo permitieron.

 

  • Exclusión. Se basa en que existe la idea de que hay personas “normales” y otras que no lo son. En consecuencia, las personas con discapacidad quedan por fuera de la sociedad ya que no se las considera “normales”. No se piensa en la posibilidad de que formen parte de ella.
    Desde esta forma de pensar se habla de impedido, discapacitado, inválido y todas las palabras que implican que tener una discapacidad implica ser considerado inferior, perder derechos básicos y no ser considerado parte de la sociedad.
  • Segregación. El término segregar hace referencia a apartar, separar a alguien de algo o una cosa de otra. De esta manera el segregacionismo es aquella política dirigida a separar, excluir y apartar a grupos tales como las minorías raciales, las mujeres, las minorías religiosas y las personas con discapacidades, entre otros, del resto de la población humana, con base principalmente a planteamientos de tipo racial, sexual, religioso, o ideológico.
  • Integración. Se sostiene la idea de “normalidad”, pero se considera que las personas que logren rehabilitarse serán consideradas parte de la sociedad. Es decir, la persona se encontrará cada vez más integrada cuanto más rehabilitada y “normal” sea. Se habla de personas con capacidades diferentes, o necesidades especiales, dos formas de no decir que tiene una discapacidad, y que refuerza la idea de la discapacidad del otro como diferente, ya que no es “normal”. En realidad, todos tenemos diferentes capacidades.
  • Inclusión. Se asocia a calidad en las relaciones, está vinculado a las emociones, a la afectividad y se relaciona con la capacidad de las personas de aceptar al otro y convivir en armonía aceptando las diferencias. La sociedad es la debe dar iguales oportunidades a todas las personas. De esta manera se explica que es responsabilidad de toda la sociedad que todas las personas puedan vivir y desarrollarse con igualdad de posibilidades. Se demuestra que la discapacidad está determinada por la interacción con entornos que pueden funcionar como barrera. Si la misma sociedad promueve entornos inclusivos, las barreras no existen y todas las personas se encuentran incluidas, ya que cuentan con iguales oportunidades para formar parte y desarrollarse en la sociedad.

A estas definiciones podemos añadir una más, la de Equidad, pues va más allá de estos conceptos; Es la acción, la demostración de sentir a tus iguales cerca, considerar los principios inclusivos como norma, es crear espacios de intercambio donde todos sean tratados según sus capacidades y necesidades. Hablamos de empatía, de justicia natural, de derechos y deberes consensuados y aceptados.